martes, 4 de mayo de 2010

Una justificación figurativa (o de por qué a todo el mundo le gustan los cuadros que se parecen a las cosas que se parecen)

El cuadro



La instalación


Se acabó la jornada¡¡¡ después de duro trabajo, de dolores de cabeza, de dias preparando una instalación en la que nadie se entera de nada, a todo el mundo le gusta el cuadro que pinté anoche en tres horas, un retrato enorme de Leni Reifensthal, que se me ocurrió hacer de golpe, porque me resultó una imagen interesante.

Hace años que no pintaba (la fotografía es otra cosa) una obra tan figurativa o realista, de hecho suelo aborrecer de tales rostros a gran escala, ¿porqué buscar una imagen tan vulgar? Para los que solo ven unas palabras ininteligibles en mi instalación, les cuento un poco a través de este cuadro !tan chulo¡


Mi instalación habla de muchas cosas, de lo que menos de política, de lo que mas de arte. Habla de las imágenes y de su desaparición, de la memoria, de la ficción, de una sustitución de la realidad propiciada por la simple impresión de que el lenguaje (cualquier lenguaje) solo existe para camuflar un rostro, de que determinados acontecimientos nos cambian desde la raiz, dirigiendo nuestro balbuceo de bebe, nuestro reconocimiento en el espejo, hacia la mudez encubierta y la mascara de los otros. Mi instalación habla de como la memoria se bifurca y crea un acontecimiento donde no lo hay, y lo hace solo para REPRESENTAR en mi propia imagen el problema al que me enfrento, sin buscarlo, al elegir ser artista, el de la muerte del arte, el del lenguaje transfigurado, el que me hace fracasar una y otra vez para buscar el fracaso como dijo Beckett, el que me hace REPRESENTAR en mi imagen no lo que sucedió (no formé ni formo parte de ello gracias a dios) sino sus consecuencias mas íntimas, que sacuden nuestro yo contemporaneo. Lo que, si puede convertir la carne muerta y pudriendose en una imagen mas, pueden convertirme a mi en uno de ellos, los genocidas.

Durante unos dias seré un recuerdo nazi, y solo de esto surge la imagen de Leni Reifenstahl (para los despistados solo decir que fué, además de una excelente realizadora cinematográfica, una de las principales artifices de la propaganda del nacionalsocialismo germano y que durante años su cámara solo enfocó a los nazis y su "grandeza") dirigiendo su cámara al espectador, con la que pretendía poner a todos los demas en mi misma situación, convertirlos en el contraplano natural de esa imagen, !por eso el cuadro es tan grande, tan realista y tan chulo¡.
P.D: no soy tan gilipollas como para pensar que alguien iba a cogerlo, pero por eso no iba a dejar de hacer ese cuadro... acabará repintado, como todos.
p.d.2: nunca me habia explicado tanto, me estaré haciendo viejo...




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